1. Se basa en educación con amor:
El amor implica respeto, comunicación y libertad. El amor se da de los adultos al niño, del niño al aprendizaje, a las personas, a la naturaleza y al conocimiento.
2. Se comprende la individualidad del niño:
No se compara a los niños entre ellos con calificaciones o cuadros de honor. Se impulsa a cada niño a seguir su instinto en el momento más adecuado para ellos.
3. Se establecen límites dentro de la libertad.
Montessori nos enseña a los padres a poner límites dentro de un rango de libertad. Así, los niños aprenderán a decidir entre las mejores opciones que se les presenten
4. Se motiva el trabajo el equipo.
En Montessori todos trabajan en equipo, y al aprender de todos se dan cuenta de que todos merecen el mismo trato.
5. Trabaja en conjunto con la familia:
En Montessori se trabaja en conjunto para lograr una educación de calidad. Además, los padres cuentan con apoyo para resolver dudas y mejorar su papel en casa.
6. Enseña valores, hábitos y cortesía:
Montessori no sólo guía a los niños hacia el conocimiento. También enseña y fomenta valores, además de higiene, orden y cortesía de forma natural y desde pequeños.
7. Fomenta un crecimiento sano:
Montessori está a favor de un desarrollo sano durante la infancia. Por ello apoya la alimentación sana, el deporte, la salida a la naturaleza y la creatividad.
8. Cuenta con ambientes propicios para el aprendizaje:
Los ambientes Montessori tienen ciertas características para que los niños se sientan libres y seguros. Además, están diseñados para impulsar la curiosidad y que el aprendizaje se lleve a cabo de una manera natural y casi autónoma.
Fuente: https://www.montessorixaltepec.com/noticia/406.html